Un hecho insólito ha tenido lugar durante el Rosario Central-River Plate, partido del Torneo Final argentino que se ha disputado esta noche en el estadio Gigante de Arroyito de Rosario (1-1). El juego ha estado detenido durante cinco minutos debido a que un perro ha saltado al césped.
Lo curioso del caso es que el perro en cuestión se ha puesto a defecar en un área. Posteriormente, tras burlar los intentos por capturarle de varios miembros del personal de seguridad, Jesús Méndez, jugador de Rosario Central, lo ha retirado del campo en brazos.
Ya anteriormente habíamos visto animales dentro de un campo de fútbol que invaden los juegos, pero si la memoria no me falla es la primera vez que uno de ellos hace sus necesidades en el momento, ahí quedara la escena para la historia sin duda alguna.